Blink-182, la banda californiana de pop-punk, ha sido una de las principales influencias musicales de finales de los 90 y principios de los 2000. Su estilo irreverente, melódico y lleno de energía capturó la esencia de una generación joven que se sentía identificada con sus letras sobre desamor, rebeldía y, sobre todo, la vida cotidiana.
A lo largo de los años, sus canciones han dejado una huella imborrable en el pop-punk y muchos adolescentes (ahora adultos). Aquí te dejamos las 5 canciones de Blink-182 que más han marcado a esta generación y esperamos escuchar en el Estadio GNP:
«All the Small Things» (1999)
Probablemente la canción más emblemática de Blink-182, «All the Small Things» es un himno generacional que sigue siendo un clásico de la música pop-punk. El videoclip, que parodiaba íconos del pop y la cultura pop, también jugó un papel clave en su popularidad.
«What’s My Age Again?» (1999)
Este tema encapsula a la perfección la actitud juvenil, inmadura y despreocupada que definió a la banda. Con su tono sarcástico y su letra que habla sobre la confusión de la adultez temprana y el miedo a asumir responsabilidades, «What’s My Age Again?» se convirtió en el HIMNO.
«I Miss You» (2004)
Con un cambio de tono hacia un estilo más melódico y emocional, «I Miss You» es una de las canciones más profundas y maduras de Blink-182. La mezcla de guitarras melódicas y la emotividad de la letra sobre la pérdida y el anhelo conquistó a muchos fans y mostró una faceta más introspectiva de la banda.
«First Date» (2001)
Con un sonido más accesible y mainstream, «First Date» es la canción perfecta para aquellos momentos incómodos y divertidos de la juventud. La canción cuenta la historia de una primera cita que es tan incómoda como entrañable, y se convirtió en un tema infaltable en cualquier playlist de pop-punk.
«Stay Together for the Kids» (2001)
En esta canción, Blink-182 aborda el tema del divorcio y el impacto que tiene en los niños. Con una crítica a las estructuras familiares rotas y la disfunción, «Stay Together for the Kids» resonó especialmente con aquellos que vivieron situaciones similares, ofreciendo una especie de catarsis a través de su sonido agresivo y melódico.